Buscar este blog
viernes, 29 de octubre de 2010
Es como esas mañanas de invierno en las que todo te da igual. Que llueva, qué más da. Entre las sábanas no dejas de dar vueltas. Y más vueltas. Prefieres eso a dormir, a soñar con ese recuerdo que no ocurrió. Le das vueltas al por qué no pasa nada si algo empezó, a lo que pensará de verdad, a por qué se comporta así, por qué de repente es diferente, por qué de repente no sabes nada, por qué de repente todo cambia, ¿por un beso? ¿por su beso? Ves que pasa, pasa de todo... y tú intentas pasar, y poco a poco lo consigues, pero en el fondo quieres saber la realidad. No sabes si esperar su actuación, no sabes si girar la cara y sonreir, nada ha ocurrido. Ya no quieres esperar más... y cada segundo que pasa te demuestra que fuises quizás un pequeño capricho, o una confusión, pero no eres lo que esperabas ser... Qué hacer...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Piko, te digo lo que tu a mi, piensa en tí, que eres quien merece la pena.
ResponderEliminarQue con caña y paciencia, todo se pesca!!
ya lo sé chiquilla, pero tanto tú como yo sabemos que es difícil...
ResponderEliminar